21.21

Mi corazón está triste, mi cabeza me endulza la realidad y yo no tengo manera de afrontarla. 
Un día antes compartimos la vida, las risas, la música y la familia y hoy, hoy estamos compartiendo el silencio, la tristeza, el dolor. No puedo describir todo lo que siento porqué al mismo no lo estoy sintiendo. 

Ojalá llegará alguien, ojalá que un rayo o un arco iris te regresará el latido, el calor tan característico y el color que siempre comparábamos en nuestras manos.

Estoy segura de que sigues aquí, escuchando y abrazando ésta nostalgia, te pido que por favor me mandes una señal para que la tranquilidad gobierne lo ingobernable y me ayudes con la fortaleza que ahora todos necesitamos.

Discúlpame si un día te ofendí, si un día pude ser muy estricta, quería protegerte, quería cobijarte porque te convertiste en mi familia, yo también he perdido a un amigo y a un hermano. 

Tal vez estoy anestesiada, tal vez la crudeza no me ha tocado el hombro pero ya me duele... Ojalá que todo fuera solo un sueño compartido y vívido. 
Ésta madrugada fría y lluviosa, me ha marcado. 

Teníamos una forma de pensar y ver la vida muy parecida, gracias por todo lo que me enseñaste y me sigues enseñando aún más allá de la verdad. 

Te extraño y te abrazo a través del tiempo y de las dimensiones.