Placer doloroso



Mi vida ha sido sin贸nimo de drama y he de confesar; por mero placer personal, desde aquella noche donde mi coraz贸n se hizo a帽icos, mi voluntad se dobleg贸 y mi persona se hundi贸 en su propio llanto. Tuve que aprender a nadar, tuve que renacer, aferrarme a m铆 misma y salir a flote... Despu茅s de todo, el problema no son las personas, el problema es que las idealizo.