Sueños 👅


Organizamos una fiesta pequeñita, somos 7, los mismos de siempre, por el mero placer de coincidir en esta vida. 

Mis papás fueron a recogerme, pero yo quiero quedarme, planearmos una pijamada de chicas, aunque realmente solo somos dos en esa sala. 


Se van mis papás y los acompaño a su coche, frente a la casa donde estamos hay una barbería y ahí logro ver a un cowboy sensual que me está llamando, nos sonreímos en forma de coqueteo y desaparezco de su vista. 


Mis amigos están cambiando el mood de la noche y el calor está subiendo, el alcohol está haciendo efecto… Algo raro está pasando, se siente un ambiente húmedo. 


Cierro los ojos y me siento mareada, de pronto me encuentro con unos labios mojados con sabor a vodka, los recuerdo, ya los he besado antes, mi cuerpo se paraliza, abro los ojos y alguien más me jala del cuello para llevarme a sus labios ¿Esto es real? Continuo besando y probando diferentes sabores. 


Tragos, risas, sarcasmo, tragos, besos, besos, besos, humedad. No sé qué está pasando, pero se siente bien, me gusta lo que estoy sintiendo, viendo y probando. 


Salgo a tomar aire, el calor me sofoca y no estoy pensando con claridad, ese vaquero me sigue llamado y camino hacia él, me toma de la cintura, me aprieta contra él y lo siento, me gusta lo veo y lo que estoy sintiendo. Me besa con fuerza, no puedo verle la cara, pero se siente familiar, esta adrenalina me está matando ¿Quién es? Siento un hormigueo en todo mi cuerpo, quiero más, necesito más. 


Tengo que tomar una decisión, una noche sin mesura con un vaquero aparentemente desconocido o una noche de locura sin frenos, reglas o remordimientos con mis amigos, sí, en plural… 


Suena la alarma, fue un sueño, no puedo describir como me siento en este momento, veo al hombre a mi lado y lo tomo, mi cuerpo pide más, él es el vaquero de mis sueños, reviví la tensión que sentía con los primeros besos, las ganas que tenía de él, de verlo arder por mí y conmigo, él es mi vaquero y yo seré su vaquera, una y mil veces más.