Bailando entre estrellas.

Cuando ella era pequeña siempre imaginaba como sería bailar con las estrellas. Creció y se olvidó de esas estrellas que la hacían soñar. 

Llegó él, sin una advertencia, se cruzo en su camino, sin una promesa de confidencialidad le entregó los latidos de su corazón, con besos y palabras al aire la llevó hasta la Luna.


Arriesgándose, volviendo a bailar entre las estrellas,
  ella se enamoró.


Todas las noches baila con las estrellas.
Él se convirtió en su pensamiento permanente.